abril 18, 2025
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Cuentos rusos: Petronoboa y el triste papel de la ARCH

Por: Pedro Javier Granja*

 

Daniel Noboa se ha referido a mi hermano -en esa payasada denominada pomposamente en Ecuador como debate presidencial- un torneo barato de insultos huérfano de propuesta alguna y ha dicho que trabajar es cometer un delito, cumplo en alfabetizar al cínico y patético presidente, pues lo que sí es un crimen es traficar combustible subsidiado por el estado, como en el caso PETRONOBOA.

 

CAPÍTULO UNO

Acaba de perder a su hijo de 6 años por falta de atención médica en un hospital público. En medio de su desgarrador momento tiene unos segundos de cordura y reflexiona y tiene exacta conciencia que, de no haber sido porque millonarios inescrupulosos se roban el dinero de la gente para seguir coleccionando billetes que nunca terminarán de contar, su pequeño se habría salvado porque los médicos que no lo asistieron, las medicinas que no tuvo, los equipos que no se compraron responden a un modelo criminal llamado estado neoliberal.

Varios días después, encuentra en una “librería” callejera, un ejemplar usado de “La apuesta”, un libro que obligatoriamente todo aspirante a abogado, periodista o a ser humano debería leer. Chejov intentó constituirse en una especie de Prometeo de las letras rusas. No se sabe a ciencia cierta si lo logró o no, pero lo que no se puede negar es que, tenía talento.

Queda atrapado en una historia que gira en torno a un banquero y un abogado que un buen día se ponen a discutir qué hacer frente al delito. El banquero cree en la pena de muerte y el abogado le ofrece argumentos sobre la validez de la restricción de la libertad.

El banquero le dice que la pena no vale la pena, que la solución más efectiva y sensata sería matar a todos los que cometen un delito, por menor que sea. Ante las refutaciones del jurista, el millonario le plantea una apuesta macabra: le dará dos millones de rublos si el abogado acepta pasar 15 años privado de la libertad. El letrado acepta, por ego y ambición, y saldrá muy mal parado de semejante aventura.

 

En las siguientes páginas emergen un montón de reflexiones morales y por supuesto filosóficas. Una obra colosal sin duda.

Le resulta inevitable, a la madre que perdió todo, pensar en la Agencia de Regulación y Control Hidrocarburífera, en el caso PETRONOBOA que a todas luces está adoptando el rol del abogado de los denunciados, confundiendo su papel en esta historia y a cambio de mantenerse en sus puestos no se dan cuenta que están tratando de evitar que se comprueben, de modo más rápido, la veracidad de hechos aciagos y sin duda terribles, que en cualquier otra sociedad habrían provocado un escándalo de proporciones bíblicas.

CAPÍTULO II

Ella entiende que debe aferrarse a algo para poder eludir el camino a la locura porque el dolor de perder un hijo no se compara con nada, no tiene definición en ningún diccionario, en lengua alguna. Se entrega a Dosto, y al tiempo que devora “Los hermanos Karamazov”, descubre, que en mayo de 1878, dos años antes de la publicación de la obra cumbre del genio ruso, mientras estaba por terminar el libro, el autor perdió por varios meses la cordura por la muerte de su hijo de tres años, Alekséi, a quien llamaba cariñosamente Aliosha. Dostoyevski no se perdonó hasta el final de sus días que su hijo haya muerto a causa de la epilepsia una condición que heredó de él. La desesperación de Dosto es palpable para cualquier lector medianamente serio. Dostoyevski bautizó Aliosha al héroe de la novela, además de darle a este personaje todas las cualidades que él mismo admiraba. Más nítido todavía, cuando llegó capítulo del capitán Sneguiriov y su pequeño hijo Iliusha, pudo percibir que allí se sentaba en actas eternas del pensamiento, todo el viacrucis que sufrió el escritor. En Los hermanos Karamazov se retrata la miseria humana, se expone al hombre tal cual, el hedor de su necesidad de matar, al que sea, incluso a su propio padre, con tal de saciar su ambición sin límites.

Mientras camina rumbo a su casa, escucha en la radio, a un abogado que arriesga su vida peleando contra las mafias hace más de dos décadas, y vuelve de golpe a Absurdistán, su supuesta patria porque en la jodida realidad, los pobres no tienen nada, ni estado, ni policía, ni justicia, ni matria, ni patria, sólo tienen verdugos, y se entera de algo que no cuentan deliberadamente los grandes medios de comunicación, llega a sus oídos que, en el caso Petronoboa, la ARCH no quería entregar información alguna, por eso, un fiscal debió ir hasta sus oficinas en el sector de La Armenia en Quito, a pedir que les contesten y recién el 10 de marzo entregaron un oficio en el que indican:

  1. Que efectivamente PETRONOBOA S.A.S está registrado como propietario e inicia la operación de los Centros de Distribución RIO VERDE automotriz e industrial, a partir del 13 de marzo de 2024.

Anexan las resoluciones Nro. ARCERNNR- DCOMH-2024-0043-RES (para el segmento automotriz) y Nro.ARCERNNR-DCOMH-2024-0044-RES (para el segmento industrial).

PERO LO QUE NO DICEN ES QUE NO TARDARON NI 24 HORAS EN EMITIR DICHAS AUTORIZACIONES Y QUE NINGÚN OTRO TRÁMITE SE HIZO EN TAN POCO TIEMPO

EN TODA SU HISTORIA. Omiten información clave, pero le corresponde a la Fiscalía exigir que les suministren los nombres de los funcionarios que participaron en tan generoso y veloz desenlace para que expliquen jurídicamente por qué la celeridad y bajo qué base jurídica procedieron de tal modo.

 

  1. Dice la ARCH que “ha controlado” los volúmenes autorizados de diésel automotriz para el centro de distribución RIO VERDE, sin embargo, no dice nada respecto a que, en el mismo detalle, se observa que, para finales del 2023 e inicios de 2024 ya se limitó dicho volumen a un máximo de 285.000 galones/mes, mientras que luego de que se cambia el propietario a PETRONOBOA S.A.S. en vez de disminuir, se aumentó el volumen autorizado hasta llegar cerca de 400.000 galones/mes (387.000). Raro porque ni siquiera TODAS las gasolineras juntas del sector pueden vender ni la tercera parte de estos volúmenes. Siendo así, Petronoboa ha vendido 1200 veces más que sus competidores que tienen décadas en el negocio.
  2. En el anexo 1 se detallan los volúmenes despachados por EP Petroecuador, efectivamente se verifica que a RIO VERDE, propiedad de PETRONOBOA S.A.S., durante el año 2024 se le despacho 3.763.022 galones de diésel automotriz y apenas 97.004 de diésel Con este solo dato ya se debió haber allanado Petronoboa porque se está dejando claro que todo lo que hemos denunciado es cierto.

Sorprende además saber el volumen de 1.098.387 galones de fuel oil que recibió Petronoboa en el 2024 sin tener tanques ni infraestructura para ese producto.

  1. Respecto a los volúmenes que ha despachado EP Petroecuador a los otros centros de distribución automotriz del cantón El Triunfo, “se les olvida” poner los volúmenes totales en el anexo 2, pero es notorio que mientras la mayoría de estaciones de servicio de la zona mantienen volúmenes de entre 10.000 y 40.000 galones mensuales de diésel automotriz, el centro de distribución automotriz RIO VERDE, propiedad de PETRONOBOA S.A.S., mantiene volúmenes de más de 000 galones/mes. Nuevamente, que no se note la preferencia, estamos hablando con datos que entrega el mismo ente de control, la ARCH.

Queda claro que ni por más que deseen ayudar a los Noboa, la contundencia de la denuncia es tan potente que no les queda más que tratar de confundir a la gente con palabrería barata pero en lo central, están CONFIRMANDO la veracidad de los datos que el abogado y ex candidato presidencial presentó

  1. En el anexo 3 se remite los despachos realizados por EP Petroecuador a los centros de distribución industrial del cantón El Triunfo, en donde se nota claramente que mientras otro centro de distribución industrial de la zona maneja volúmenes de entre 000 y 50.000 galones mensuales de diésel industrial, el centro de distribución industrial RIO VERDE, propiedad de PETRONOBOA S.A.S., apenas le compra a EP Petroecuador entre 2.000 y 10.000 galones/mes.

LA ARCH CONOCÍA ESTAS DIFERENCIAS DE VOLUMEN, DEBIDO A SU “CONTROL” MENSUAL EN LAS PROGRAMACIONES Y DESPACHOS DE EP PETROECUADOR.

¿QUE HIZO? ¿ENCUBRIR AL HERMANO DEL PRESIDENTE? SUS PROPIAS RESPUESTAS LOS DELATAN.

  1. Se remite en el anexo 5, copias certificadas de diez (10) Autorizaciones para la Compra de Derivados de Petróleo para los Segmentos Industriales desde el centro de distribución industrial RIO VERDE, propiedad de PETRONOBOA S.A.S.; las cuales se encontraban vigentes durante todo el año 2024 y aún están vigentes, que suman una necesidad total de 3.085.200 galones de diésel industrial por año. Nuevamente, la pregunta del millón o de los 9 millones de dólares en este caso, que es lo que hizo PETRONOBOA A.S. en su primer año de vida, es ¿DE DONDE SACÓ EL COMBUSTIBLE PARA ABASTECER A SUS CLIENTES INDUSTRIALES SI EN

 

TODO EL AÑO A EP PETROECUADOR NO LE COMPRÓ NI 100.000 GALONES DE

DIÉSEL INDUSTRIAL? Al parecer y ahora con datos oficiales de la ARCH, es más que claro que ese volumen fue desviado desde el segmento automotriz.

Habrá que preguntar y averiguar si todo el aparato de control estatal está haciendo algo ahora, porque el último despacho reportado en enero 2025, de diésel industrial por EP Petroecuador al centro de distribución industrial RIO VERDE, según el anexo 3, fue de apenas 2.970 galones; mientras dicho centro de distribución industrial necesita según las autorizaciones emitidas por la ARCH, al menos 257.100 galones/mes para abastecer a sus clientes.

  1. Se indica que la autorización del catastro industrial para la COMPAÑÍA DE ELABORADOS DE CAFÉ EL CAFÉ C.A. ubicada en KM 10 VIA MONTECRISTI – MANTA, se informa que la misma fue emitida el 23 de agosto de 2024, con el Nro. AUT-ARCH-CI-DDMA-41-2024, con un volumen de 96.000 galones/mes de diésel industrial y 390.000 galones/mes de fuel oil, como consta en el anexo 6. ¿Cómo le distribuye PETRONOBOA S.A.S., casi 100.000 galones/mes a ésta empresa de su propio grupo económico, si solamente compra 970 galones de diésel industrial?

ELABORADOS EL CAFÉ no ha parado su producción, ¿de dónde obtiene el combustible que necesita?

Entiende entonces la madre que ha perdido a su hijo, en medio de su tristeza infinita, que el propio presidente de la República, asesorado por un montón de ignorantes, desea “meter preso” al denunciante en lugar de pedirle perdón al país por lo que han venido haciendo, quieren meter preso al abogado que expone valientemente el caso por ser un ex candidato a la presidencia de la República con estudios de postgrado en 6 Universidades europeas, el único con experiencia en investigaciones antimafia por haberse atrevido a exponer estos negociados.

Estamos hablando de un presidente psicópata que ha perdido absolutamente la razón, si es que en algún momento la tuvo. Se trata del mismo tipo que acusa al correismo de haber roto todos los diques de contención de un estado de derecho cuando él hace exactamente lo mismo.

Ella se entera, estupefacta, como el presidente en lugar de responder con DATOS la denuncia sobre este tema, se dedica a atacar no sólo al denunciante sino amenaza públicamente a su hermano, también abogado, con postgrado en política criminal, trilingüe, por trabajar en el Municipio de Guayaquil, porque forma parte del círculo de extrema confianza del Alcalde de esa ciudad, pero la pregunta es ¿con quién gobierna Noboa?, ¿con sus amigos o con sus enemigos? por lo tanto tratar de amedrentar al denunciante con acusaciones tan absurdas como que habría tráfico de influencias por la actividad laboral lícita de su familiar, es sencillamente hilarante y vergonzoso.

Pocos días después, mientras tiene en su cabeza la inmundicia del caso Petronoboa, se encuentra con su novio, quien la ha querido en serio y luego de invitarle un café y escucharla atentamente, le regala “¿Cuánta tierra necesita un hombre?”, escrita por Tolstoi y publicada en 1886, que narra las aventuras del campesino Pahom, quien impulsado por la codicia, emprende un viaje sin retorno en búsqueda de propiedades y más propiedades. Al final, la ambición es tan grande, que, su deseo de tener más y más lo terminó convirtiendo en un ente idéntico a un tóxicodependiente y mientras no se detiene en su frenética tarea de acumular fincas y predios, el autor no imaginó que luego existirían gasolineras, queda en medio del desierto y allí muere, como un nada, como un nadie. Su criado empuñó la azada y cavó una tumba para Pahom, y allí lo sepultó. Dos

 

metros de la cabeza a los pies era todo lo que necesitaba. Esa es toda la tierra que necesitamos. Fue entonces cuando, gracias a los cuentos rusos, tuvo por fin, una especie de consuelo a su eterno martirio, porque se dio cuenta que hay tipos que hace rato miraron la existencia en medio de dolores similares al suyo y están claros que lo único que nos llevaremos serán esos dos metros de arena, el resto, es sólo una maldita ilusión, como la maldita ilusión de querer callar la verdad callando a quienes la cantan.

La señora que acaba de perder a su hijo por falta de atención médica en un hospital público, que adquirió exacta conciencia que votar por tipos como Daniel Noboa es altamente irresponsable porque el neoliberalismo inyecta violencia en nuestras vidas y sólo está interesado en hacer más asquerosamente ricos a los ricos aun a costa del exterminio de civilizaciones enteras, que entendió que su niño pudo haberse salvado si millonarios delincuentes no se aprovechasen de los recursos del estado y los invirtieran en obra social, siente, al menos por unos minutos, cierta melancólica paz, al saber que el abogado denunciante a sabiendas que lo pueden asesinar o encerrar injustamente, seguirá adelante con esta batalla por la vida.

Pedro Granja

*Master en Estudios contra la Criminalidad Organizada por la Universidad de Turín y la Universidad de Napoli Master en Criminología Crítica por la Universidad de Bologna Ex candidato a la presidencia de la República. Profesor universitario de Política Criminal en postgrado. Fundador de la Clínica para defender gratuitamente a niños víctimas de abuso sexual.

 

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